Otra vez la Bahía de Algeciras

Y van... no se sabe. De hecho ya han sido varias las entradas que, en el poco más de un año que lleva este blog, se le han dedicado a los "incidentes" ocurridos en la Bahía de Algeciras. Sin embargo, siguiendo el dicho que dice que "las palabras se las lleva el viento", en esta zona de la península ibérica las buenas intenciones parece que quedan borradas con las mareas.

Ayer parecía que teníamos mejores noticias al respecto de la Bahía de Algeciras, por cuanto el Foro de Expertos sobre Gibraltar ha decidido crear varias comisiones referentes a temas ambientales, entre ellas una destinada a tratar el tema de los vertidos.

Sin embargo, ayer nos amanecíamos con la noticia de que el buque "Rhea", procedente de Ceuta encalló en la playa del Rinconcillo, como consecuencia del temporal de viento. Podría parecer un incidente más, pero la constante repetición de este tipo de hechos debe hacer reflexionar sobre lo que está ocurriendo en el puerto de la Bahía de Algeciras, donde cada vez que hay un temporal de viento ocurre algún accidente. Afortunadamente en esta ocasión el buque estaba vacío y no se ha producido ningún desastre ambiental, pero bien hubiese podido ocurrir lo contrario y nuevamente estaríamos buscando un culpable mientras el medio ambiente marino de esta zona se vería nuevamente afectado.

Como digo, afortunadamente no ha sido este el caso. Pero hay elementos que nos deben hacer nuevamente reflexionar. La Autoridad Portuaria ha informado que el capitán del barco rechazó la ayuda de Capitanía Marítima y la pregunta es este caso es si Capitanía Marítima, viendo la situación no pudo enviar los medios necesarios para evitar el accidente.

Y lo peor es que la situación pudo ser mucho peor por cuanto el buque "Teide Spirit" se soltó de la monoboya de la refinería de Cepsa, aunque es este caso pudo controlar la situación.

Seguramente la secuencia de actuaciones a partir de ahora nos será conocida, pero me temo que el resultado final será también el de siempre: declaraciones de buenas intenciones cara al futuro. Pero lo que todos pensamos al respecto se resume en sólo dos palabras ¡Basta Ya!