La aventura del Plastiki. Un viaje en un barco de plástico reciclado

Más de una vez he mostrado mi admiración por los grandes aventureros, porque no se les puede llamar de otra manera, que se adentraron en frágiles embarcaciones a surcar los océanos. Por ello no puedo por menos que hacerme eco de la aventura que pretende llevar a cabo David de Rothschild.

Este británico ha dedicado los últimos tres años a atender las necesidades de "Plastiki", un catamarán de 18 metros, construido con botellas plásticas recicladas y que recorrerá el Océano Pacífico desde San Francisco (EE.UU.) hasta Sydney (Australia).

El viaje estaba planeado para el año pasado pero miles de detalles lo retrasaron. A mediados de febrero el "Plastiki" tuvo su primera prueba de navegación y en marzo, dependiendo de las condiciones climáticas, emprenderá el viaje de 11 mil millas náuticas.

David de Rothschild ha cruzado el continente Antártico, la Amazonía y los hielos de Groenlandia, además de escribir varios libros para salvar el planeta. Ecologista, National Geographic lo premió en 2007 como explorador emergente haciendo hincapié en su organización "Adventure ecology". Enwww.adventureecology.com hay cientos de recursos para que los niños vean que salvar el planeta es "tan atractivo, divertido y fascinante que ellos mismos quieran involucrarse".

Con ese mismo espíritu nació esta aventura plástica. En 2006 llegó a sus manos un informe del Programa de la ONU para el Medio Ambiente, que decía que el 90% de la basura que flota en los océanos es plástico. La gran acumulación de botellas en el mar lo impactó a tal punto, que en conjunto con sus colaboradores idearon navegar sobre la contaminación, literalmente.

"Habitualmente las embarcaciones son diseñadas con los mejores y más avanzados materiales, pero nosotros utilizamos basura", explicó a The New York Times. "Por momentos sentimos que estábamos trabajando en un agujero negro, con ningún punto de referencia más que nuestro último error o éxito. Fue increíblemente desafiante".

La estructura de la embarcación está hecha con 13 mil botellas de plástico recicladas, rellenas con hielo seco (ver infografía). La superficie de la embarcación es antideslizante por una mezcla de castañas de cajú, azúcar y arena. Y la cabina por un nuevo tipo de plástico que es resistente y reciclable a la vez.

Durante la travesía, De Rothschild tiene planeado filmar el parche de basura del Pacífico, una "isla" de contaminación dura de casi dos veces la superficie de Chile. Documentar el basural servirá de comparación con otra acumulación similar en el Atlántico, recientemente estudiada. Aunque se estima que en extensión serían equivalentes, la del Atlántico alcanza en algunas zonas la increíble densidad de 200 mil pedazos de basura por km.

Para seguir la aventura: http://www.theplastiki.com/

Fuente: El Mercurio.