21 de mayo de 2009

Ocupación DPMT



Hoy les traigo una interesante información aparecida días atrás en el periódico "Málaga Hoy" en referencia a la situación del Dominio Público Marítimo Terrestre en uno de los municipios costeros más conocidos de la península ibérica, como es el caso de Marbella y que creo que no necesita ni comentario.
Muros de obra con valla metálica. Alambradas. Parte de una piscina y de un jacuzzi. Zonas verdes. Palmeras. Parterres con cactus. Una caseta de obra. Un quiosco. La lista de obstáculos con los que se han topado los técnicos de la Demarcación de Costas en la puesta al día de la franja de dominio público marítimo-terrestre del litoral de Marbella es amplia. Más de 27 kilómetros de costa dan para mucho y casi cinco décadas, fecha de las penúltimas líneas divisorias entre la zona pública y la privada marcadas por el Estado, para más.
De momento, este trabajo de campo ha fraguado en la apertura de 27 expedientes de recuperación posesoria de oficio del dominio público marítimo-terrestre, en todos los casos conforme a las lindes dibujadas entre los años 60 y 70, esto es, antes de la Ley de Costas de 1988. La táctica es pasar primero revista a los casos que se retrotraen a hace décadas para luego hacerlo con los afectados por el deslinde más reciente. En muchos casos la línea divisoria es coincidente, pero en otros es mucho más restrictiva, caso de las playas de tipo dunar.
El objetivo de esta treintena de expedientes, según explicó a este periódico el jefe de Costas, Francisco Javier Hermoso, es investigar si los titulares de esos muros, vallas, jardines o piscinas que invadieron en su día la zona pública cuentan con algún tipo de título o de concesión que les autorizase para ello. «En ningún caso se trata de sancionar sino de ver si se hicieron conforme a la ley», abundó. Los afectados tendrán un plazo de ocho días desde el pasado martes, fecha en que se publicó la apertura de los expedientes en el Boletín Oficial de la Provincia de Málaga (BOPMA) para presentar las alegaciones o las pruebas que demuestren sus derechos sobre esa franja de terreno. Caso de ser rechazadas o de no tener ningún tipo de autorización, deberían retranquearse para ajustarse a la legalidad. Si fuese al contrario, podrían acogerse a la petición de una concesión temporal conforme a la Ley.
De Guadalmina al Pinillo
«En algunos casos puede ser que se hicieran los muros por desconocimiento. Que compraran una parcela en los años 80 y no supieran que por ahí iba la línea», explicó el jefe de la Demarcación de Costas. Sea como fuere, los primeros 27 afectados ya han recibido información sobre la apertura de los expedientes, que afectan a estructuras que jalonan la costa desde la playa de Guadalmina hasta El Pinillo, pasando por Nueva Andalucía, El Ancón o Casablanca.
En la lista se encuentran propiedades del hotel Marbella Club -un edificio con cierre de aluminio y cubierta de brezo, una terraza con hamacas, dos rampas, una escalera de acceso al paseo marítimo, setos a modo de vallado y zonas verdes en la playa de Nagüeles, con una superficie de 669 metros cuadrados- o un muro de obra de unos 80 centímetros de altura en la playa de Cortijo Blanco, que ocupa unos 68 metros cuadrados y que figura a nombre del Ayuntamiento de Marbella.
No se quedan al margen los chiringuitos, en el punto de mira en los últimos meses. En esta primera criba para recuperar suelo para uso público se encuentra el establecimiento ubicado en la playa de Río Real, propiedad de la sociedad Toquisqui, que fue precintado la semana pasada por Costas por carecer de permisos. Según indicó el propio subdelegado del Gobierno central en Málaga, Hilario López Luna, el expediente está en este caso pendiente de una resolución judicial para decidir sobre su demolición.
Cinco proyectos
Y eso sólo en las invasiones anteriores a la Ley de Costas. El resto se verán más adelante, cuando toque pasar revista a las nuevas lindes, aprobadas en los últimos años tras entrar en vigor la nueva legislación. Desde 2004 se han redactado cinco proyectos de deslinde del término municipal marbellí, desde Guadalmina hasta Cabopino. El más rezagado fue el tramo, de cuatro kilómetros de longitud, desde la margen derecha del río Guadaiza, en San Pedro. En todos estos casos se les dio audiencia a los afectados que, como era de esperar, mostraron mayoritariamente su disconformidad con los nuevos trazados.
En total, según los datos que maneja la Dirección General de Costas, el municipio podría recuperar 68.341 metros cuadrados de playa al dominio público marítimo terrestre. La mayoría se corresponde, como en estos primeros 27 casos, con zonas de jardín o de ampliación del espacio de chiringuitos ubicados a pie de playa.
Con todo, en virtud de una disposición transitoria de la Ley de Costas se permite a los afectados cuyas propiedades queden entre el antiguo y el nuevo deslinde mantener un derecho concesional al uso existente -no de propiedad- durante 30 años siempre que se ajusten a la legalidad. Es precisamente el resquicio que usa el Ayuntamiento para mantener algunos chiringuitos.

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