5 de octubre de 2010

Biodiversidad en los océanos

Comenzar un trabajo para descubrir nuevas especies marinas es todo un seguro de éxito, dado el desconocimiento que, aún hoy, tenemos de nuestros mares y océanos. Pero comenzar la tarea de llevar a cabo un censo de vida marina es, sin duda, todo un reto. Pues ese reto comenzó hace 10 años y en estos días se estás dando a conocer sus resultados.

A lo largo de este tiempo han ido saliendo noticias esporádicas en las que, como consecuencia de los trabajos realizados, se daban a conocer nuevas especies en lugares hasta este momento totalmente inexploradas. Pero ahora ha llegado el momento de recuento: 6.000 nuevas especies descubiertas, 250.000 especies que se estima que existen en el mundo submarino... sin duda son cifras espectaculares que son, al menos desde mi punto de vista, una de las noticias más destacadas de este año dedicado a la biodiversidad.

Pero estos datos nos deben llevar mucho más allá. Deben impulsar las estrategias y planes para proteger, poner en valor y ser capaces de gestionar esta enorme biodiversidad. 

Y es que mientras tenemos planes para conservar la biodiversidad "terrestre" aún estamos comenzando con las actuaciones relacionadas con la biodiversidad de nuestro mundo submarino, por mas que entidades como la Unión Europea insistan a los países miembros a establecer nuevas zonas de protección marinas.

Por ello, creo que este es un buen día para acercarles un documento que elabora en este momento la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía: La estrategia andaluza de conservación de la biodiversidad.

En este documento, que pueden consultar en la web, se establece en su línea estratégica 4.5 la promoción de la sostenibilidad de la biodiversidad a través de la gestión integral del medio marino y litoral, con los siguientes objetivos específicos:


1. Reforzar la biodiversidad en el contexto de la planificación integrada y la regulación normativa en el Medio Marino y Litoral.

2. Consolidar y reforzar las redes de seguimiento, vigilancia y evaluación del estado ecológico de las aguas de transición y las aguas marinas y costeras de Andalucía.

3. Mejorar el conocimiento sobre la biodiversidad y los ecosistemas litorales y marinos y promover la transferencia de la información.

4. Impulsar la puesta en marcha de programas y acciones específicas dirigidas a la conservación y gestión de la biodiversidad en el medio marino y litoral.

Entre estos objetivos aparecen algunas acciones concretas como son la aprobación de la estrategia andaluza de gestión integrada de zonas costeras, la aprobación de la Ley de Pesca sostenible, el desarrollo de redes de seguimiento y vigilancia por demarcaciones marítimas, la creación de una Mesa Intersectorial del Litoral (EAGIZC) que facilite el encuentro y coordinación entre las políticas estratégicas que convergen en el medio marino y litoral (política agraria y pesquera, política ambiental, política turística y deportiva, planificación territorial y urbanística, etc) o el fomentar la función como activo socioeconómico de la biodiversidad marina y litoral y su potencial en el desarrollo de actividades turísticas sostenibles.

Estas son sólo algunas de las acciones planteadas, pero el conjunto de todas ellas nos debe permitir poner en valor la biodiversidad marina, pero no sólo con el objetivo de protegerla, sino también con el objeto de obtener una rentabilidad económica derivada de los bienes y servicios que la misma genera, por cuanto la estrategia en su conjunto pone un especial énfasis en la importancia del ser humano.

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